martes, 19 de enero de 2016

HAY DÍAS

Hay días en los que hay gente;
rebaños humanos que ríen,
gritan, bailan y corren.
Todos van al unísono,
sin destino ni norte,
en una suerte de carrusel,
que la locura propone.
Luces de colores destellan
como cromáticos soles.

Hay días en los que no río,
en los que me niego a montar
en el carrusel del destino,
en los que mis ojos espejan
de mi corazón el vacío.
Las risas impertinentes se alejan
y no encuentro ningún sentido.

Hay días en los que mi ser,
en gris mortaja se anida,
en negra cueva se oculta,
huyendo del bullicio de la vida,
del ansia febril de la gente,
maldita ola que golpea los muros;
incansable,
insistente,
levantados en torno del alma mía.

Hay días...